El nuevo bus náutico revoluciona la manera de desplazarse por el puerto de Barcelona
Dos catamaranes cero emisiones conectan el Moll de Drassanes, junto a la estatua de Colón, y el Moll de Llevant, donde está el Hotel Vela
El bus náutico que unirá la Rambla con el Moll de Llevant se hará con un barco de cero emisiones
por Cristina Buesa
El Port de Barcelona estrena este jueves el bus náutico, un transporte ecológico a bordo de dos catamaranes eléctricos, que está llamado a revolucionar la movilidad de toda la zona. Su estreno se ha hecho coincidir con la celebración de la Copa América de vela, que arranca a finales de agosto, pero su permanencia en el Port Vell cambiará la manera de desplazarse entre los dos extremos, ahora desconectados. Solo el tiempo dirá si es una atracción turística o si la ciudadanía barcelonesa se lo hace suyo y da el salto.
Las autoridades y responsables del servicio, con el alcalde Jaume Collboni al frente, han hecho el viaje inaugural este miércoles. La multinacional de movilidad Alsa ganó el concurso, culminado en un tiempo récord, tal como ha explicado el director del Port Vell, David Pino. Hacía más de 15 años que se hablaba de crear un servicio de este tipo y, una vez más la competición deportiva y tecnológica de este verano, ha sido la chispa que lo ha logrado.
De 7 a 19 horas
Dos catamaranes, el Ecocat Dos y el Ecocat Tres de la compañía, que ganó la licitación compitiendo con otros dos aspirantes, harán el recorrido. Ambas embarcaciones son cero emisiones, ya que son 100% eléctricas y funcionaran con energía solar y conexión eléctrica. Además, las placas solares que llevan generarán el 40% de su consumo.
Durante un mínimo de 12 horas al día, con frecuencias entre los 15 y 30 minutos, los catamaranes unirán dos extremos que ahora mismo se debían recorrer en vehículo privado, en transporte público o a pie. De momento hará de 7.00 a 19.00 horas, ha explicado el responsable de Alsa en Catalunya, Pere Calvet. El recorrido durará unos 10 minutos, aunque el viaje inaugural ha durado algo más. El billete sencillo costará 1,9 euros («menos que el autobús», ha subrayado Pino) y habrá la posibilidad de comprar billete de ida y vuelta (por 2,85 euros), abonos de 10 viajes, para 2 y 30 días (por 40 euros), y descuentos para niños, jóvenes y para personas mayores.
Ahorro de emisiones
Según la autoridad portuaria, el uso de embarcaciones cero emisiones permitirá ahorrar 180 toneladas anuales de CO, a la vez que supone una alternativa rápida y atractiva al transporte terrestre que contribuirá a descongestionar el tráfico rodado por los paseos Colom y Joan de Borbó, «algo que agradecerán los vecinos», ha destacado el alcalde Collboni.
El bus náutico cuenta con una parada en el Moll Drassanes y otra en el de Llevant, donde se ubica en la nueva estación marítima que ocupa los antiguos tinglados, rehabilitados recientemente. La estación marítima está equipada con servicio de restauración, que lleva la empresa de comida saludable Honest Greens.
El pequeño, pintado por Okura
El Ecocat Dos tiene una eslora de 11,90 metros y una capacidad para 56 pasajeros; y el Ecocat Tres tiene una eslora de 14,70 metros y una capacidad para 84 pasajeros. El primero está equipado con dos motores de 20 Kw y el segundo con dos motores de 50 Kw. Ambos modelos, diseñados por Naval Architecture Marine Engineering y construidos por el astillero cántabro Metaltec Naval, tienen una velocidad de crucero de 5 nudos y una autonomía de 8 horas de servicio ininterrumpido.
El más pequeño, que hasta ahora daba servicio en Santander, está pintado por el artista Okura y se quedará en Barcelona hasta que se construya otro como el grande, en un año aproximadamente.