Copa América de vela e IA: todavía lejos de apartar a los ingenieros del diseño
Unos kiwis imbatibles se llevan la victoria el primer día de la Copa América de vela en Jeddah
Guía de la Copa América de vela Barcelona 2024
por Cristina Buesa
La eclosión de la inteligencia artificial (IA) y la aplicación que esta puede tener en diversos campos también ha llegado a la competición de vela histórica que se celebrará en Barcelona este verano. La Copa América cuenta con amplios equipos de ingenieros en sus seis escuadras, que en los últimos meses han explorado cómo incorporar esta tecnología en la construcción de los futuros AC75 o en la navegación. No obstante, aseguran desde las filas del defensor del título, el Emirates Team New Zealand, la IA aún está lejos de apartarlos de sus funciones.
Esta fue una de las reflexiones de Roger Frigola hace unas semanas en el Tech Spirit, donde se le invitó a explicar su experiencia como responsable de la optimización de la escuadra kiwi. «A lo mejor dentro de 10 años le podemos dar a la IA los 80 folios de normativa de la Copa América de vela y nos sacará los planos. Pero ahora mismo estamos un poco lejos de todo esto. La IA que utilizamos es muy concreta, es ‘machine learning’ que aprende a partir de muchos datos y que tiene unas capacidades sobrehumanas pero para hacer unas cosas muy concretas. Sí que es cierto que existen muchos otros aspectos en el diseño del barco que involucran a la IA, pero a día de hoy sigue siendo necesaria la inteligencia y la habilidad humana», sostuvo el especialista.
Una década con el equipo
Frigola cumple una década en las filas de los kiwis, desde que en un lejano 2014 le llegara un correo electrónico del ahora equipo de Grant Dalton para incorporarse a sus filas. No lo dudó un instante. Con estudios en en la Universitat Politècnica de Catalunya y en la École Nationale Supérieure de l’Aéronautique et de l’Espace de Toulouse, el ingeniero nacido en Barcelona se doctoró en Inteligencia Artificial y Aprendizaje Automático por la Universidad de Cambridge. Trabajó para Airbus y el equipo McLaren-Mercedes de la Fórmula 1, donde estuvo cuatro años, y también asesoró a las escuderías de Ferrari y Red Bull o firmas como Porsche, Bosch o Bodegas Torres.
Discreto y también escueto en sus intervenciones públicas, este barcelonés de 40 años es uno de los catalanes que forman parte del, de momento, equipo favorito para revalidar el triunfo y mantener la jarra de las 100 guineas en su poder, dentro de algo más de 10 meses. Pero, hasta entonces, tanto los kiwis como los americanos, italianos, suizos, franceses y británicos librarán una dura (y secreta) batalla tecnológica para construir el barco volador más rápido que se haga con la victoria de la 37 edición barcelonesa.
Apurar hasta el final
«Hay partes del barco que se están construyendo y otras que todavía no sabemos cómo serán. Estamos apurando hasta el último momento e intentando optimizar al máximo el diseño para que quede justo el tiempo de fabricarlo y poder probarlo en el agua unas pocas semanas antes de competir», expuso el ingeniero de Emirates. Los seis equipos están haciendo lo mismo. Más allá de las vacaciones navideñas tras la regata preliminar de Jeddah (Arabia Saudí), retomarán en breve los entrenos con el barco más pequeño, el AC40, en Barcelona. Mientras, en sus ‘cuarteles’ tecnológicos, siguen las pruebas.
«La ingeniería es clave, ahora bien, es difícil evaluar cuánto de esto se lo podemos atribuir a la IA. Al final es una herramienta, un asistente que puedes situar en diversos puntos del proceso. Donde sea necesaria la recogida de datos, puedes entrenar a un modelo que te puede ayudar a hacer esa pequeña tarea. Y, al final del proceso, muchas tareas pequeñas van a estar ayudadas por la IA», concluyó Roger Frigola en el encuentro de Tech Barcelona.